La "Fusión de dos culturas"

Representa el nacimiento de la cultura mexicana como producto del choque de dos culturas distintas: la náhuatl, floreciente en Mesoamérica, y la española. Esto se ve claramente simbolizado en las figuras del guerrero águila y el conquistador español, los cuales mueren al mismo tiempo en la lucha. La patria mexicana estará construida por el resultado de estas dos cosmovisiones. En el extremo inferior derecho se observa una pequeña águila que surge en medio del fragor de la batalla. Representa el nacimiento de México gestado en el crisol de la guerra de Conquista. Al fondo del mural, tanto a la derecha como a la izquierda, se aprecian las insignias de los dos bandos: los penachos y estandartes indígenas y las banderas españolas, consumiéndose en el fuego de la batalla. González Camarena realizó otras obras para nuestro museo y tiene un lugar relevante como pintor y muralista dentro y fuera del país. En 1960, en colaboración con el arquitecto Carlos Obregón Santacilia, crea las esculturas para el Monumento a la Independencia en Dolores, Hidalgo; ese mismo año es invitado a pintar el mural La fusión de dos culturas en el Museo Nacional de Historia. Unos años después viaja a Cuba y a Chile; en la Habana expone en la exhibición de Pintura Contemporánea de México y en Concepción realiza una obra en la Escuela de Bellas Artes. Gracias a este artista el Castillo de San Juan de Ulúa pudo salvarse, pues en el sitio se pretendía construir bodegas y un muelle petrolero. En 1970 se hace Acreedor del Premio Nacional de Artes y en ese mismo año se realiza una exposición retrospectiva de su obra en el Museo de Arte Moderno de la Ciudad de México.