Bacante

Adolphe René Lefébvre, de origen francés, fue pintor de género y de escenas históricas. Desarrolló su trabajo durante la segunda mitad del siglo XIX y expuso en numerosos salones oficiales. Su obra juega con la referencia mitológica a la figura de Venus y hace presente las enseñanzas del dibujo académico. Esta pintura titulada "La Bacante" evidencia también elementos del espíritu romántico. El canon clásico, el reposo y la composición equilibrada muestran a un maestro representante de su tiempo.Uvas, rosas, una pandereta visible a través de hojas de parra rodean a una bacante recostada que acentúa la dirección horizontal de la pintura. Como una divinidad, la luz proviene de su cuerpo. El fondo se mantiene oscuro sugiriendo un paisaje que se abre espacialmente hacia el lateral derecho. La mujer lleva cascabeles en el brazo y en un pie. Una danzante de la corte de Baco descansa y, como si se hubiera detenido su movimiento, dirige una mirada al espectador desinhibida y sensual. La composición subraya la convivencia de dos ideas, lo clásico y lo romántico, que pertenecen al mismo proceso artístico, entrelazando ambos principios en una nueva síntesis artística. Los elementos de la obra hacen referencia sin duda al mundo de los sentidos. Música para el oído, uvas para el gusto, flores para el olfato. El mundo báquico se impone exaltando los placeres sensoriales. La obra abre un espacio a la subjetividad del pintor y sin embargo mantiene las referencias obligadas al mundo académico. Esta pintura fue adquirida por la Antigua Academia de San Carlos a mediados del siglo XIX.