Interior de la abadía de Westminster

Giovanni Brocca, en Interior de la Abadíade Westminster, hace gala de sus aptitudes como pulcrísimo dibujante de perspectivas arquitectónicas de un evidente sincretismo escenográfico que fue muy utilizado, hasta el desgaste del recurso, en la litografía decimonónica. Existe el interés por documentar vistas interiores y exteriores de edificios monumentales, acentuando en todos sus detalles la perspectiva y le manejo de la luz que realza ciertos aspectos arquitectónicos. La obra de Brocca es un digno ejemplo de la puntura de perspectiva que recobró fuerza en la Italia de mediados del siglo XIX. Ya desde el nacimiento del género de las vistas - o vedute - en el siglo XVIII, inicialmente en Venecia, los pintores italianos influyeron sobre las artes plásticas al dignificar la pintura de paisaje del natural como un género del mismo valor creativo que el del paisaje idealizado que plasmaba el romanticismo. Sin embargo, estas nuevas vistas abandonaron el carácter evocativo de las del siglo anterior, para convertirse en testimonios de virtuosismo técnico en cuya composición predominaba la perspectiva arquitectónica y urbanística. La Academia de San Carlos adquirió en 1858, por medio de Clavé, tres obras de Brocca, con quien se encontraba en deuda, pues se había encargado de los arreglos para la contratación del italiano Javier Cavallari para asumir la dirección de Arquitectura. Este cuadro se cuenta como uno de esos tres.