Ilustración para libro de 40 expositores de México

Firmada y fechada en 1933 por su autor, esta estampa xilográfica de Leopoldo Méndez fue publicada tres años después en el folleto publicitario editado por la Liga de Escritores y Artistas Revolucionarios (LEAR) con motivo de la segunda exposición colectiva de esa agrupación, realizada en el vestíbulo de la Biblioteca Nacional entre el 24 de julio y el 7 de agosto de 1936 y en la que se reunieron 80 estampas de 40 artistas. Un impreso publicitario sobre el mismo evento, o tal vez el reverso del folleto descrito, va acompañado de una ilustración a partir de otro grabado en madera, éste autoría de José Chávez Morado. Múltiples fueron las exposiciones organizadas por la Liga a lo largo de la década de 1930, tanto en las galerías de sus instalaciones como en otros espacios. La imagen constituye una visión satírica y alegórica que caricaturiza la situación política global imperante en los años previos a la Segunda Guerra Mundial. Leopoldo Méndez, militante del Partido Comunista desde 1929, realizó en ese período un vasto número de imágenes que exaltaban el ideario promovido por la Unión Soviética y que condenaban el imperialismo, al nazismo, el fascismo y aquellas instituciones identificadas con "la reacción". La imagen pone en escena una caravana en la que se representa, por un lado, a la Liga (o Sociedad) de las Naciones, un organismo multinacional que buscó como objetivos la pacificación y reorganización de las relaciones políticas internacionales al término de la Primera Guerra Mundial. Para 1933, la URSS no formaba parte de aquella organización que, para esos años, enfrentaba una fuerte crisis ante su incapacidad de contener el avance de los regímenes militaristas. En la escena, son identificables a la derecha tres figuras femeninas dispuestas en una pose que recuerda a las multi-representaciones clásicas y académicas de las tres "Gracias" o Carités. Entre sus brazos, se despliega una banda con la que se identifica a la Liga de las Naciones. Las tres figuras, cuyos rostros se ocultan tras unas máscaras anti-gas, se elevan sobre un cañón cargado a cuestas por tres soldados con el torso desnudo, mientras levantan con sus manos una bomba que amenaza al ángel de la paz, quien parece dormir plácidamente sin percatarse de la amenaza. Al centro de la escena se erige una mujer robusta, una figura grotesca que caricaturiza a la aristocracia o la burguesía. Entre sus pies camina "el reformismo": un perro faldero con el que Méndez satiriza aquellas posturas críticas del marxismo ortodoxo y del régimen soviético. A la izquierda de la imagen, en pleno equilibrio compositivo y simbólico, Méndez hace alusión al fanatismo religioso y al poder de la jerarquía eclesiástica: dos hombres, igual con el torso desnudo, cargan con esfuerzos sobre sus hombros una gran cruz de madera en la que cómodamente se dispone un sonriente representante de la Iglesia, quien sostiene entre sus manos sendas bolsas de dinero. Finalmente, en la parte superior, se eleva una figura diabólica quien parece dar dirección a la procesión. La imagen se ajusta a las posiciones políticas e ideológicas de un sector amplio de la LEAR y denota el espíritu de la disputa ideológica prevaleciente de la época, tanto en el contexto nacional como internacional.