Paseo cartográfico por la
Ciudad de México

 

Soy la ronca miseria,
la gris melancolía,
el fastidio hecho carne.
Yo soy mi corazón desamparado y negro.

Ciudad, invernadero,
gruta despedazada.


Declaración de amor (fragmento), Efraín Huerta

 
 

La ciudad de México, hoy Ciudad de México, la que Bernal Díaz del Castillo nombrara como la Muy Noble y Leal Ciudad de México es, no una sino muchas ciudades. Histórica y territorialmente. Ciudad de México se ha ido construyendo a partir de transformaciones radicales de su espacio urbano por lo que las formas de habitarla se han tenido que adaptar; o acaso tal vez es la ciudad la que se ha adaptado a nuestros modos caóticos de habitarla. Tan es así que se tuvieron que desecar los lagos para permitir el establecimiento de nuevos barrios; los pueblos fueron absorbidos por nuevas colonias; los cerros y los volcanes ya no habitan más que en la memoria; drenamos los ríos o los entubamos para que nuestros vehículos puedan circular sin obstáculos.

 
 
Biombo, plano de la Ciudad de México

 

Museo Nacional de Historia

Biombo, plano de la Ciudad de México

Museo Nacional de Historia
 
 

Nuestra ciudad, nuestra Ciudad, ha sido cartografiada para dejar testimonio de su crecimiento constante. Si bien la urbanización novohispana procuró una ciudad ordenada a partir de retículas con una gran plaza central que sería el centro de la vida social, política y cultural, las necesidades de los pobladores que constantemente llegaban a ella demandaron desbordar sus límites administrativos y los naturales también. Ciudad de ciudades, la capital mexicana es protagonista y testigo de cambios incesantes. Sin embargo, su encanto radica no tanto en lo nuevo sino en lo que permanece y que nos remite a su origen.

Cada período histórico está marcado por una urbanística propia y por estilos arquitectónicos que se disputan el derecho a protagonizar el espacio urbano. Decía Guillermo Prieto en su libro titulado Por estas regiones que no quiero describir que

“Las calles de México, en su transformación, me ofrecen unas páginas materiales, pudieran leerse en ellas nuestras revoluciones, nuestros desaciertos, servir de termómetro de nuestros atrasos o adelantos, de nuestras pasiones, de nuestros caracteres.”

Por estas regiones que no quiero describir

 

Dirección General de Publicaciones

Por estas regiones que no quiero describir

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Así, de los escombros de la gran Tenochtitlán, capital del imperio Mexica, se fundó la capital de la Nueva España. Con la reforma se buscó destruir los cimientos del viejo régimen eclesiástico derrumbando sus conventos o dándoles usos civiles. Debemos recordar que la iglesia gobernaba las conciencias y la vida civil y era la institución que fijaba los límites administrativos a través de la jurisdicción eclesiástica, misma que establecía una división étnica entre las parroquias de españoles y las parroquias de indios. Esta situación cambió en 1772 al establecerse una división territorial de la ciudad1. El Porfiriato trajo un sueño de modernidad y progreso dejando su huella en la traza de la ciudad. Y así se suceden nuestros atrasos, adelantos, pasiones y caracteres dejando huella en el paisaje de la ciudad.

Plano de la Ciudad de México

 

Museo Nacional de Historia

Plano de la Ciudad de México

Museo Nacional de Historia

Te invitamos a dar un recorrido por la antigua Ciudad de México para vivificarla al andar por sus calles. Explora la ciudad a través de esta breve cartografía y busca las huellas de nuestro pasado.

1 Lombardo de Ruiz, Sonia (compilador), De la Torre Villalpando, Guadalupe (compilador), Gayón Córdova, María (compilador), Morales Martínez, María Dolores (compilador), Territorio y demarcación en los censos de población: Ciudad de México 1753, 1790, 1848 y 1882. Colección Científica.

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